La fractura del hueso escafoides es una de las lesiones más frecuentes producida en la mano por traumatismos y caídas. El escafoide es un hueso de la muñeca que se articula con 5 huesos: radio, semi-lunar, hueso grande, trapezoide y trapecio. El escafoides está poco vascularizado con lo que su osificación es más costosa y lenta.
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Tipos de fracturas del hueso escafoides
El tratamiento a realizar de una fractura en el hueso escafoides depende de la localización de la rotura en el hueso.
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Fractura cerca del pulgar
Las fracturas de escafoides que están cerca del pulgar en general se recupera en cuestión de semanas con la protección conveniente. Esta parte del hueso escafoides tiene una buena irrigación de sangre necesaria para que el hueso suelde.
El médico pondrá su brazo y su mano en una enyesadura que generalmente va a llegar hasta bajo el codo.
Su médico controlará la consolidación tomando radiografías periódicas u otros estudios por imágenes, como una tomografía computarizada (CT). Estos estudios por imágenes se utilizan para confirmar que el hueso ha afianzado.
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Fractura cerca del antebrazo
Si el escafoides está quebrado en la parte media del hueso o más cerca del antebrazo, la consolidación es más difícil. Estas áreas del escafoides no tienen una buena irrigación de sangre.
El médico trata esta clase de fractura con una enyesadura, esta seguramente incluirá al pulgar. Asimismo podría extenderse por encima del hombro.
Rehabilitación para fractura de hueso escafoides
En ambos casos, cuando la fractura del hueso escafoides requiere cirugía o no, va a deber emplear yeso o una férula mientras que la fractura se afianza. Esto podría perdurar hasta 6 meses. A lo largo de este periodo de consolidación, salvo que su médico lo apruebe:
- Evite cargar objetos pesados.
- No participe en deportes de contacto.
- No trepe escaleras ni árboles.
- Evite actividades con peligro de caer sobre la mano.
- Ciertas personas tienen rigidez en la muñeca tras padecer fracturas de escafoides.
Es fundamental mantener el movimiento completo de los dedos a lo largo de todo el periodo de recuperación. Su médico le proveerá de un programa de ejercicios, y podría aconsejar terapia de mano para ayudarle a recobrar el movimiento y la fuerza de su muñeca.
En la mayor parte de ocasiones esta lesión pasa inadvertida debido a que hay que apreciarla a través de una radiografía, sosteniendo la mano en una situación torcida lo que genera mucho dolor en el paciente y es fácilmente confundible con otras fracturas.
El escafoides es uno de los huesos pequeños en la muñeca. Es el hueso de la muñeca con más probabilidad de romperse. El escafoides está situado en el lado de la muñeca que corresponde al dedo pulgar, en el área donde la muñeca se flexiona.
Principales causas de fractura del hueso escafoides
Una fractura del hueso escafoides por norma general es ocasionada por una caída sobre una mano abierta, con el peso que recae en la palma de la mano. El extremo de uno de los huesos del antebrazo (el radio) asimismo podría fracturarse en este género de caída, en dependencia de la situación de la mano al aterrizar.
Las fracturas del escafoides ocurren en personas de todas las edades, incluyendo los más pequeños. La lesión frecuentemente ocurre realizando actividades deportivas o en un accidente de vehículo. Los hombres de 20 a 40 años son quienes tienen más probabilidad de padecer esta lesión.
No hay peligros concretos, ni enfermedades que aumenten la probabilidad de sufrir una fractura de escafoides. Ciertos estudios han probado que el empleo de muñequeras a lo largo de actividades como el skate, el snowboard y el surf puede reducir la probabilidad de romperse un hueso de la muñeca.
¿Cuáles son los síntomas más frecuentes de una fractura en el hueso escafoides?
La fractura del hueso escafoides en general ocasiona dolor y también inflamación en la base del pulgar. El dolor podría ser severo cuando mueve el pulgar o la muñeca, o cuando se trata de agarrar alguna cosa.
Salvo que su muñeca esté desfigurada, es posible que no sea obvio que el escafoides está fracturado. En ciertos casos, el dolor no es severo y podría confundirse con un esguince. Cualquier dolor en la muñeca que no desaparezca tras un día de dolor podría ser un signo claro de fractura.
- Dolor en la mitad radial de la muñeca.
- Incremento del dolor al presionar sobre la articulación.
- Incapacidad para sujetar objetos.
- Inflamación.
- Entumecimiento.
- Hematomas.
Diagnóstico para fractura del hueso escafoides
El dolor y la inflamación en la muñeca por norma general van a obligar a una persona con una fractura del hueso escafoides a ver a un médico.
Las radiografías pueden enseñar si un hueso está fracturado y si hay desplazamiento (un espacio entre los huesos fracturados). En ocasiones, un escafoides fracturado no aparece en una radiografía de manera inmediata.
Si es el caso, su médico podría poner su muñeca en una férula a lo largo de 1 o 2 semanas. Le va a tomar una nueva radiografía para poder ver si la fractura se hace perceptible. La férula debería emplearse a lo largo de este periodo de espera y debe evitar levantar objetos pesados.
Podría hacerse una investigación por imágenes de resonancia imantada (MRI) para visualizar los huesos y los tejidos blandos. Esto en ocasiones muestra una fractura del escafoides ya antes que pueda verse en la radiografía.